Vivimos una época intensa, marcada por una revolución en las comunicaciones que nos aporta cada día nuevas herramientas y nuevos canales. Esta proliferación de caminos podría generar por momentos cierto aturdimiento. Personalmente prefiero interpretarlo como una oportunidad para recuperar la esencia de la comunicación one to one. Con la segmentación de audiencias y la optimización de canales que nos aporta el Big Data, la creatividad cobra una nueva dimensión: debe gustar a todos y a cada uno, pero sobre todo debe ser eficiente. Es un reto al que respondemos con la pasión que define nuestra razón de ser: buscar la mejor forma de comunicarnos con los demás.